El gobernador de Georgia, Brian Kemp, demandó legalmente a algunos alcaldes que hicieron obligatorio el uso
NORTEAMERICA.- El gobernador de Georgia, Brian Kemp, primero demandó a la alcaldesa de Atlanta, Keisha Lance Bottoms, porque ésta hizo obligatoria la mascarilla o cubreboca. Dijo que no tenía autoridad, que se excedió de poder.
“La ciudad de Atlanta solo puede ejercer los poderes que le otorga el estado, y los intentos de la alcaldesa Bottoms de ejercer un poder no delegado contra el estado” no están permitidos, dice la demanda.
Luego firmó una orden ejecutiva el pasado miércoles y prohibió a todos los condados hacer obligataria la prenda a pesar de que él mismo fue, al principio de la pandemia por COVID-19 un partidario y promotor del cubrebocas
“Los protectores faciales o cualquier otro equipo de protección personal mientras se encuentren en lugares de alojamiento público o en propiedad pública están suspendidos”, advirtió y echó para abajo la intensión de 15 gobiernos locales para frenar la pandemia, según reportaron medios locales en el estado de Georgia.
Georgia batalla por los diversos brotes de coronavirus que ubican al estado como uno de los de mayor contagios de toda la Unión Americana. En Georgia, de acuerdo a la base de datos de la Universidad Johns Hopkins, el miércoles registró 37 muertos y 3.871 nuevos contagios por coronavirus, convirtiéndose en la segunda cifra más alta desde que comenzó la pandemia.
A la fecha, en todo el estado se alcanzó la cifra de 3,091 muertos y 127,838 casos positivos de coronavirus.
En la ciudad de Savannah, en donde se encuentra la histórica catedral gótica de San Juan Bautista, el alcalde Van Johnson indicó que la regulación de las máscaras sigue vigente y los que no la usen recibirían una multa de 500 dólares y prohibió hasta el 31 de julio en donde prohíbe reuniones de más de 50 personas.
La demanda, presentada por el gobernador republicano Brian Kemp, alega que la alcaldesa de Atlanta, Keisha Lance Bottoms, no tiene la autoridad para exigir medidas de salud pública más estrictas que el estado.
“La ciudad de Atlanta solo puede ejercer los poderes que le otorga el estado, y los intentos de la alcaldesa Bottoms de ejercer un poder no delegado contra el estado” no están permitidos, dice la demanda.
Afirma igualmente que Bottoms carece de autoridad para decidir que la ciudad vuelva a la “Fase 1” de confinamiento.
“Me niego a quedarme sentado y observar cómo políticas desastrosas amenazan las vidas y los medios de vida de nuestros ciudadanos”, dijo, alegando que las acciones de Bottoms ponen en peligro la economía de Atlanta.
Bottoms, que ha dado positivo al virus, respondió en Twitter: “3,104 georgianos han muerto y mi familia y yo estamos entre los 106 mil que dieron positivo a la covid-19”.