Tras el rechazo de la reforma eléctrica en la Cámara de Diputados, el presidente Andrés Manuel López Obrador aclaró que ya no enviará más iniciativas en materia energética pero pidió a los próximos aspirantes a la presidencia continuar insistiendo con su propuesta.
“No voy a volver a enviar otra iniciativa de reforma eléctrica porque me quedan dos años, cinco meses, pero quienes vienen detrás lo deben intentar, hay que recuperar los bienes del pueblo de la nación, que oligarcas corruptos de México entregaron a los extranjeros”, comentó este lunes.
En adelante se enfocará en una reforma a la Ley Minera en la que se plantea el litio como un bien de la nación, por lo que no se podrán otorgar nuevas concesiones para su explotación.
También buscará fortalecer a la empresa y se comprometió una vez más a controlar el precio de la luz a pesar de no haber logrado obtener la mayoría calificada necesaria para que el despacho eléctrico pasara a manos de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Durante la conferencia de prensa mañana insistió en que los próximos candidatos a la presidencia continúen trabajando hasta lograr que el petróleo, la industria eléctrica y el litio pasen a manos del estado.
Mientras tanto, reiteró que no anulará los contratos establecidos a partir de la reforma energética pero no descarta que la situación cambie en un futuro, siempre y cuando se consulte a la gente.
“Estoy respetando lo contratos porque solo dos están funcionando (de 110), la mayoría o no invirtieron, engañaron o vendieron las acciones, especularon”.
“Quien llegue tiene que decidir porque los compromisos se cumplen, quien llegue le tiene que preguntar al pueblo, se quedan esos bloques o se recuperan”, señaló.
SOBRE LA VOTACION
AMLO consideró el rechazo a la reforma eléctrica como un “acto de traición” por parte de los legisladores que votaron en contra de la iniciativa en la Cámara de Diputados.
“En vez de defender los intereses del pueblo, de la nación, en vez de defender lo público, se convirtieron en francos defensores de empresas extranjeras que se dedican a medrar, a robar y estos diputados respaldaron a los saqueadores”, comentó este lunes en conferencia de prensa.
La reforma eléctrica necesitaba de la aprobación de las dos terceras partes de la Cámara, sin embargo, este domingo solo logró obtener 275 votos a favor, 223 en contra y 0 abstenciones, por lo que fue desechada.
Por esos resultados, el presidente se lanzó en contra de los priístas a quienes llamó “paleros” por cumplir con la voluntad del Partido de Acción Nacional.
“Fue vergonzoso ver al PRI como palero del PAN. Lamentable, el partido que surge por la revolución, ahora de paleros del PAN, y lo del PAN como lo hemos dicho pues tiene alguna justificación, porque ese partido surgió para defender empresas extranjeras. Ya se terminó de integrar el bloque conservador, qué bueno porque ya no hay simulación”.
Sin embargo, el mandatario se mostró satisfecho con el ejercicio al cual consideró como “aleccionador” y lo comparó con la compra de votos para la aprobación de la reforma energética durante el sexenio de Enrique Peña Nieto.
El 12 de agosto de 2013 fue presentada la propuesta de reforma energética de Enrique Peña Nieto, misma que fue declarada constitucional el 20 de diciembre del mismo año a través del Diario Oficial de la Federación (DOF), esto después de que fuera aprobada en el senado el 11 de octubre de 2013 y en San Lázaro un día después.
¿Qué buscaba la iniciativa de reforma eléctrica de AMLO?
El principal objetivo de la iniciativa de la 4T es derogar la reforma energética de 2013, a través de una serie de modificaciones en los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución, así como agregar algunos artículos transitorios. Las modificaciones darían como resultado lo siguiente:
• Favorecer a las plantas estatales de generación eléctrica para ser autosuficientes.
• Recortar las ventas de energía de proyectos privados que provienen del extranjero, es decir, las energías limpias se verían limitadas al intentar despachar luz eléctrica al país. En la reforma de 2013 se dio luz verde a empresas para vender el excedente de energía que produjeran para el autoconsumo.
• Este tema se ha vuelto controversial recientemente, ya que la embajada de Estados Unidos en México señaló que existía la posibilidad de que se abrieran litigios con el vecino del norte, ya que la reforma podría ir en contra de los acuerdos del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
• El Centro Nacional de Control Energía quedaría bajo control de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).