NORTEAMÉRICA.- Desde hace cuatro años, bajo el gobierno autoritario de Bashar Al-Assad, y con la reciente irrupción de la milicia terrorista Estado Islámico, que pretende establecer el Islam como única religión, los conflictos armados azotan Siria y más de cuatro millones de personas emigraron para buscar refugio.
EEUU está obligado a ofrecer un año de asilo a quien lo solicite y ya que México es el camino más rápido y es más fácil obtener una visa turística aquí que allá, más sirios buscan llegar pasando por nuestro territorio.
En lo que va del año, 243 iraquíes y 272 sirios entraron al país con diferentes visados. Siete iraquíes y nueve sirios fueron presentados ante la autoridad migratoria mexicana en calidad de indocumentados, tenían la esperanza de llegar a EEUU.
Mientras que en Europa el número de refugiados sirios ya alcanzó los 7 millones y a pesar de lo “atractivo” que resulta el país, menos de 100 sirios han pedido refugio en México, es muy difícil lograrlo.
Kaldohún, quien llegó hace años al país y fundó la Asociación de Sirios en México tras la muerte de su hermano y su sobrina, explica la situación: “ya tenemos más de un año tocando puertas, al Ejecutivo Federal, al Congreso, y al Gobierno del DF, pero no hemos obtenido respuesta”. Se la han pasado “canalizándolos” a otras instituciones gubernamentales y ya tienen en sus manos más de 100 copias de pasaportes de paisanos que les solicitan ayuda.
La comunidad siria apenas rebasa las 300 personas (asentados principalmente en el DF, Jalisco y San Luis Potosí). Kaldohún considera que muchos de los que vienen sólo están de paso e intentan llegar a EEUU. Hasta en Migración le dijeron que “si quería traer a alguien debía firmar un contrato con ellos de un año y conseguir la visa”. Pero en calidad de refugiados no los aceptan.
Efectivamente, la asociación sólo recibe apoyo de organizaciones civiles y de familias. Pero su objetivo no es sólo que les den los visados, sino que ya estando en el país les puedan brindar seguridad y servicios de salud básicos a sus paisanos que escapan de la guerra. Hasta ahora ya van 60 mil muertos.
La postura de México frente a esta afluencia todavía no está definida, Luicy Pedroza, del Instituto Alemán de Estudios Globales y Regionales (GIGA), afirma que “se está intensificando la presión ejercida por la sociedad civil sobre el Gobierno con miras a que abran canales regulares para la inmigración de refugiados.”
Efectivamente, ayer mismo la plataforma Change.org lanzó una petición para recaudar firmas y lograr que el presidente Enrique Peña Nieto brinde refugio a 10 mil migrantes sirios.
La fracción de izquierda en la Cámara de Diputados se sumó a la causa y presentó un punto de acuerdo, en donde exhortan al ejecutivo a fijar una postura y diseñar una agenda de trabajo, dando asilo y refugio a quienes se han visto afectados por esta crisis humanitaria”.