El Instituto Nacional de Migración, entregó este jueves tarjetas de visitante por razones humanitarias a las dos hijas de la migrante salvadoreña Victoria Esperanza Salazar Arriaza, víctima del homicidio en Tulum, Quintana Roo.
Los documentos expedidos por esta autoridad migratoria permitirán a las menores de edad seguir el proceso de resolución de su solicitud de refugio tras la muerte de su madre, de 36 años, a quien una policía le fracturó el cuello al someterla por su comportamiento irracional en la calle y en una tienda Oxxo.
La Secretaría de Gobernación realizó este sábado por la mañana el traslado a El Salvador, de los restos mortales de la mujer fallecida el 27 de marzo.
En la aeronave que partió del Aeropuerto Internacional de Cancún, Quintana Roo, viajaron la madre, el hermano e hijas de Victoria Esperanza Salazar, así como la directora de Protección a Migrantes de la Dirección General de Derechos Humanos en El Salvador, Ana Irma Rodas de Mendoza.
El avión aterrizó en San Salvador, donde el embajador de México en esa nación, Ricardo Cantú Garza, recibió a los familiares dolientes de la señora Victoria.
Esta acción se coordinó desde la Secretaría de Gobernación, a través de la subsecretaría de Derechos Humanos Población y Migración, la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres (CONAVIM) y el Instituto Nacional de Migración (INM), con la participación de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) y el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (SNDIF), así como la Administración General de Aduanas.
Asimismo, se contó con el apoyo del gobierno del estado de Quintana Roo y del Consulado de San Salvador en la entidad.
El caso de Victoria Salazar puso en crisis diplomática a los dos países después de que el presidente salvadoreño cuestionó la inacción de las autoridades mexicanas para investigar las denuncias de abusos sexuales en contra de una de las hijas de la mujer por parte de su pareja de nacionalidad mexicana